Estos son los radares de las carreteras españolas

La seguridad vial de las carreteras españolas está muy asociada a la velocidad de tránsito de los conductores por las carreteras de nuestro país. Un país en donde las muertes en carretera son casi una plaga que cada año se lleva la vida de miles de personas.

Elementos disuasorios como los radares instalados en todos los rincones de las carreteras españolas, el carné por puntos y nuevas leyes de circulación han conseguido que se haya pasado desde el año 1992 hasta el 2012 de 5000 muertos por accidente de coche a 1300 en una disminución progresiva que nos sigue mostrando datos trágicos, ya que más de 1.000 muertos al año en las carreteras es toda una tragedia, pero también nos muestra la esperanza de un cambio en la tendencia año tras año.

mapa-radares

Actualmente la Dirección General de Tráfico tiene un total de 1.200 radares de los cuales 850 son fijos y estan colocados de forma estratégica para controlar la velocidad de las carreteras españolas. Las estadísticas hablan de que cada año se ponen unos 3.8 millones de multas por exceso de velocidad en esos puntos.

Estas multas llegarán a tu casa de forma casi inapelable gracias a la prueba que aporta un radar de velocidad. En este punto tenemos que decir que aprovechar el uso de un aparato detector de radares con GPS instalado en nuestro coche que tiene toda una base de datos con estos radares repartidos por nuestras carreteras nos ayudará, no solo a evitar las multas sino a conducir de forma más segura por evitando accidentes indeseables que pueden tener las consecuencias más graves posibles.

radares-fijos

La recaudación que hace la DGT con multas a través de estos radares llegan a los 200 millones de euros al año. En las comunidades de Galicia, Castilla la Mancha, País Vasco y Madrid se encuentran los radares fijos que más multas producen dentro de una lista de los 25 radares más peligrosos para nuestro bolsillo.

Otro de los problemas es el de los coches radar, que son los radares móviles. Para detectarlos necesitarás de un detector de radar con antena que sea capaz de captar con la distancia necesaria para poder reaccionar, la cercanía de una radar. Estos coches radar tienen algunas características como que son coches de 4 o 5 puertas, la mayoría de color plata aunque también hay blancos, negros y azul oscuro. Siempre circulan dentro de la velocidad permitida, así que si os encontráis un coche en vuestro camino a velocidad por debajo de la velocidad permitida tened cuidado a la hora de adelantarlo y exceder estos límites de velocidad.

En el interior, los conductores de estos coches radar, por ley, deben de llevar ropas refractantes, pero no uniforme necesariamente. Pero lo mejor es disponer de un detector de radar que es un dispositivo completamente legal en nuestras carreteras para poder detectarlos y evitar la multa en caso de ir a una velocidad poco apropiada.

Con una media de 400 euros más otros 200€ por la instalación, en el caso de ser un detector fijo, tenemos buenos dispositivos que con una distancia de alrededor de 700 metros nos pueden avisar de la cercanía de uno de estos radares gracias a la captación de las señales que envía el radar o de las frecuencias en las que se mueven.